viernes, 13 de septiembre de 2019

Victory

That is the moon and it's my moon
While we're up high on the eleventh story
Y estamos nerviosos como adolescentes
Y abajo la vida continúa,
Mientras que nosotros hicimos una pausa
And it is silent because we don't know how to say what we should be saying
Nadie habla ni se atreve a romper el silencio
Porque después de las noches en vela,
Después de la fiebre y el ayuno
Silence is perfect
And we want to keep perfect as it is
Y ya no recordábamos cómo era la vida aquí afuera.




sábado, 17 de agosto de 2019

Nunca me han violado

Tal vez yo no tengo derecho a quejarme porque a mí no me han violado. Me han venido siguiendo por kilómetros enteros desde un auto cuando yo iba caminando, también desde otro auto cuando yo iba conduciendo. Un hombre me siguió en su bicicleta, otro iba en moto. Muchos a pie. Me han seguido de a uno, de a dos y en grupo; esos fueron los más preocupantes, porque iba yo sola o con otra mujer, incluso con mi hija; una niña. Los muy cobardes. Me han seguido tantas veces, que ya perdí la cuenta.

Nos pasó tantas veces a mi hija y a mí, que desde los diez años ella carga con navaja y gas pimienta y aprendió cómo usarlos. Tanto, que se ha vuelto cínica y reacciona con más ira que miedo.

Eso le ha servido para escapar de peligros, como la vez que la venía siguiendo desde la parada del bus en el breve tramo a casa, un idiota vestido de payaso y ella lo ahuyentó improvisando un lanzallamas con su encendedor. O la vez que un pendejo se desabrochó el pantalón y le mostró sus miserias.

Le ha servido porque así  es el mundo donde le tocó vivir y no hace más que defenderse, pero mi corazón de madre llora por ella, porque en su juventud ella debería preocuparse por sus materias de la escuela, por ir a conciertos y comer pizza con sus amigos. No por estar siempre a la defensiva, atenta al pendejo de hoy y cómo se va a defender. Le robaron su inocencia.

Me sorprendió una vez cuando  le hizo una seña con el dedo a nuestro vecino septuagenario. Cuando le pregunté el por qué, me dijo que cuando su padrastro y yo no estamos en casa, el vecino se planta en la banqueta, desde donde mira a su ventana . Que a veces él toca nuestra puerta -aun de madrugada- para decirle palabras soeces y una vez intentó entrar. Que se para desde el balcón -mal construido en su propiedad-, para poder ver hacia nuestro patio y cocina y desde ahí la observa.

A mi hija tampoco la han violado. Pero ni ella ni yo nos sentimos seguras caminando por una calle cualquiera, ya ni siquiera en nuestra propia casa. Y no solo por el vejete. Antes de vivir allá, vivíamos en otra casa y era frecuente escuchar pasos en nuestra azotea en las madrugadas. Eran dos hombres, a veces solo uno. Varias veces nos despertaron de nuestro sueño, mi hija se venía a mi cama o yo a la de ella, nos abrazábamos y permanecíamos en alerta, agazapadas, listas para patear testículos y gritar fuerte... Pero ellos se iban, nunca entraron estando nosotras en casa. Estábamos bajo ataque solo escasos minutos. Pero esos minutos eran suficientes para ya no poder conciliar el sueño. Y podemos decir "es que no pasó nada". No nos violaron. Pero, ¿acaso algo así es justo?

Llamábamos a la policía. Cuando nos contestaban, mandaban una unidad, pero siempre tardaba en llegar. Otras veces no lográbamos comunicarnos. En dos ocasiones se metieron a robar cuando no estábamos. El único apoyo que teníamos cerca, era el vecinito flaco puberto que vivía en la casa de enfrente, de la edad de mi hija. Pero con más huevos que esos acosadores que se decían "hombres".

En otra casa -es que abundan los pendejos, ¿o de plano tenemos mala suerte?- una vez se metió el marihuano del barrio a robar objetos de nuestro patio. Los envases de vidrio, tanques de gas, herramientas y fierros, todo se llevó. Mi hija y yo oíamos ruidos, pero estaba oscuro y nosotras dormidas, tardamos en identificar lo que estaba pasando. El idiota de mi ex-marido le había dicho a "su amigo" -otro vecino- que nos dejaría solas unos días por viaje de trabajo, que le encargaba mucho. Qué ingenuo.

Le hablamos a la policía, pero primero llegó mi madre. Bajó de la silla que había puesto para brincarse la barda a esa escoria humana que estaba robándome. Le puso una golpiza, hasta que los policías le dijeron que si seguía golpeándolo, tendrían que llevársela también a ella.

Creo en los buenos elementos de policía, he visto varios. Pero en el momento que lo necesité, me han defendido más mi madre, mi hija y el vecinito puberto.

Sé lo que es vivir bajo asedio, es horrible, pero aún así me considero con suerte. Nunca me han violado.

Y tal vez por eso, a pesar de todo lo que me ha pasado, no tengo derecho a quejarme. No tengo el derecho a destruir propiedad ajena, a pesar de que un ex-novio a quien yo amaba y en quien confiaba, se quitó el condón a mitad del acto sexual sin mi consentimiento. Cuando lo confronté, dijo: "¿Por qué te enojas? Yo lo hice por tratarse de ti, creí que entre nosotros no había problema".

Tal vez el hecho de haber sufrido infidelidades y violencia física, emocional y financiera de parte de mi ex-marido, no me da el derecho a hacer pintas ni romper vidrios. Ciertamente, eso no me regresaría a mi amiga que hace veinte años, siendo aún menor de edad, salió de su casa a cortarse el cabello y nunca regresó. No va a recuperarle a mi otra amiga su semestre perdido cuando, estando en Bachilleres, salió embarazada de su entrenador cuarentón que la obligó a abortar.

No sé... Creo que hacer destrozos tal vez no evite que violen o maten a una más de nosotras. Lo que sí está logrando es iniciar una conversación. Salir en las noticias, para variar no como víctima, sino esta vez algo diferente. Nos falta mucho camino por recorrer todavía. Mucho qué cambiar. El mundo está polarizado entre la violencia y la indiferencia. El ataque y el contraataque. Pero el cambio anhelado no se ve en el horizonte todavía. Yo también quiero paz. Pero me doy cuenta que como sociedad, aún no estamos listos para eso.

Nunca me han violado. Ésa es una experiencia que espero nunca vivir ni ver tan de cerca. Desde mi trinchera cuidaré a mi hija, a mis hermanas y mis amigas. Sepan que no están solas. Yo solo espero regresar entera a mi casa cada vez que salgo.

miércoles, 31 de julio de 2019

Out of time

I want to do things. Then I don't.
Sometimes I wonder who the owner of my life is
where am I going
why am I still here if I am "not here"
I am starting to suspect
I might not like this anymore
but then again, what do I like?
What do I want?
Where would I be better?
What is my true call?

I'm running out of time already
one less sunset for me tonight
out of the countdown to the end of my life
no one ever warned me it would run out this fast
time won't wait, yet here I am
waiting for time, looking for something
that might never be,
a signal to point which way I should go.

Day in and day out, it's just
an empty road to nowhere
There is no one else to blame but me.
Sometimes I forget my essence and I can't seem to find
Myself amidst the background noise
And this blurry hologram called life.

A mind is a beautiful thing to make up.
Then, why can't I make up my own mind?
Alas, life slips away second after second
And we can never get our time back.


sábado, 13 de julio de 2019

Vivo absorta en mi propia vida
Víctima de mi propio desamor
Busco alegría en lo simple
Siento, luego existo.

Y a veces me cuestiono
Si esta existencia es lo que quiero
Me da miedo perderte
Pero cada vez me entrego menos
Guardo un espacio para mí
Eres intolerable a veces
Olvido lo mucho que te amo
Anhelo sentir que tú también me amas
Que estamos juntos y nada más importa.

viernes, 12 de julio de 2019

Karma

We live on memories
And on the moonshine against the black sky
I used to be a dreamer
But then there were no days and no nights and I didn't have any more dreams.

The world is void
Voices are echoes fading far away
Where no dream could no longer visit
And your arms were gone for forever and left me behind with all these hugs not given,
Unforgiven
And alone

lunes, 6 de mayo de 2019

Successful love story

I'm lost in the warm white skin, in the pale blue heaven beneath the sheets, in this place and time and the storybook that I am keeping.

The same old words still, my murmur hot in your ear, your hands on the same spot in my chest, yet it all feels so new, white hairs give way to the old smiles, the ancient looks in our faces now, now that our feet feel heavier and heavier every morning, now that this love is the only drop of youth left for you and me.

I look at all the memories, back to the time when we were other people. Little nobodies who were content with little things, so that big things like love, seemed more meaningful. Now big things seem little, and little things are insignificant. We're almost not there anymore. Holding stern looks into the nothingness. How did we become this?

Then I hold your hand. You're still sleeping by my side and I feel safe again.
Maybe some other night we'll sleep together. We're in the big bed, with the soft, sleek covers. Two shiny cars are parked outside. And most importantly, we've defeated weirdness, gossip, death and shit.
If this is not the definition of success, then what is it?
I thought I heard you say you love me.


martes, 2 de abril de 2019

Pan

Tu pan vida. Mi pan vida
Hecho migajas, bajo mis pies en la cocina,
Del día de hoy, no perdurable
En el agujero negro que es la existencia,
Cubierto de queso, lo único que te gusta
Y el roce de mis nalgas con mi antebrazo cuando camino
Esas seis libras se convirtieron en adornos
¿Quién creería que estorbarían tanto al caminar?
Pero a ti te gustan
Aunque pesen y estorben
Te gustan quizá porque gustan a los otros
Y en verdad, no pesan tanto
No tanto como lo demás
Cargando con tus vidas pasadas
Y las presentes llenas de "algias" y "osis" o de vacío
Hasta escuchar mi propio eco
En donde todo es azul
Y somos migajas imposibles.

Si no te la comes hoy, para mañana la vida ya no estará buena. Somos polvo antes del viento. Hoy aquí estamos.

viernes, 22 de marzo de 2019

22-03-19



Cuando intentas dar tu mejor cara, aunque ya se agotó tu colección de sonrisas.
Y una vez más toca abrazarse y salvarse uno mismo,
de la cada vez más desgastante experiencia de permanecer.

miércoles, 20 de marzo de 2019

Seige

I'm in the crossfire
In evenings going out, with uncertain return
In familiar places turned dark and dangerous
Made theirs
Made forbidden by them
Sitting helpless amidst a war not my own.

Happy memories have gone sad in the city
Sunsets will never be the same
Flushed in blood and lead
And eaten by the never ending nightmare
With Death waiting behind every corner
Smiling,
Busy impersonating happiness
To those who can't tell right from wrong,
Those foolish enough to fool themselves.

I don't care about your sad little life.
Don't make me witness your misery.
Don't be so proud of yourself.
We know you don't deserve the air you breath.
Silence is precious now.
Quiet your guns and shut your mouth.

miércoles, 6 de marzo de 2019

Adolescence

I listen when she speaks. She's the good mood of spring evenings.

Her heart full of mysteries her words can't explain. Like her vision of the universe.

Her cynical sour little smile
from her shiny plump little lips
Edging that tiny pretty mouth
full of fries and curse words.

Life is but a series of surreal bizzare meaningless events.
I am a product.
There are no eyes, no ears.
Just a slab of dry, cold metal.
Long gone are the Princess days.